Lo prometido es deuda pequeñas…. los días empiezan a ser más larguitos y las excusas para no mover hasta las pestañas se nos van acabando (bueno, a la de la pierna escayolada le vamos a dar una tregua 😉 ) Así que hoy toca hablar del movimiento… aquello que hace que nuestra energía se consuma de forma óptima y que las acumulaciones en forma de michelín se esfumen como por arte de magia.
Como no soy una experta, pero sí una ávida lectora, os voy a hacer un resumen de un libro que me ha encantado (ya he hecho alguna referencia al mismo en algún otro post) y del que he aprendido un poquito más. Se titula «Saborear» y está escrito por el maestro Thich Nhat Hanh y la Doctora Lilian Cheung ¡Aquí van sus sabios consejos que espero os ayuden y encanten tanto como a mí!
Beneficios del ejercicio:
- Disminuye el riesgo de dolencias crónicas (como la diabetes, las enfermedades del corazón, la elevada presión sanguínea, el colesterol malo y algunos tipos de cáncer)
- Estimula el ánimo, mejora la calidad de vida, ayuda a gestionar el estrés y disminuye la depresión 🙂
- Aumenta la longevidad…. y yo quiero seguir pasando ratos de risas inigualables con vostras muuuuchos años
- Mejoran el funcionamiento cerebral (mejorando, por ejemplo, la memoria)
- Puede ayudar a gestionar el déficit de atención y las conductas adictivas… importante para dejar de picotear, de fumar, …
- Y para lo que nos ocupa en este reto: previene la obesidad y ayuda en la pérdida de peso (siempre y cuando el gasto de energía no se una a un mayor consumo de calorías)
¿Cuál debe ser mi nivel de actividad física?
- Aquí va la mejor noticia: lo que sea, por poco, es mejor que nada 😉
- Actividad recomendada para obtener beneficios del deporte: 2,5 horas de ejercicio aeróbico moderado a la semana (power walking, aguagym, baile de salón, …) ó bien 1,5 horas de actividad física energética (footing, natación, aerobic, …)
- Actividad recomendada para perder peso: 5 horas de ejercicio de ejercicio moderado a la semana… pero ¡tranquis! No hay que hacerlo de golpe… mejor poco a poco… empezaremos por los 20 minutillos al día y acabaremos por las 5 horas a la semana sin problema, de hecho es más que probable que tu cuerpo te pida esa horilla de ejercicio al día (que nos lo diga nuestra Eva 😉 ) Recuerda que los cambios que estamos haciendo pretenden mantenerse a lo largo de nuestra vida, así que no te apuntes al gym para hacer 3 horas de spinning a la semana porque acabarás agotada y probablemente agobiada… stressada… a picotear 🙁 Es mucho mejor tomárnoslo con la calma que requiere un cambio que marcará la diferencia
Ponemos soluciones a los problemas 🙂
- Es que…. ¡no tengo tiempo!
- Levántate mas temprano: a medida que pase el día te será más difícil encontrar tiempo para hacer ejercicio. Quizás te resulte más fácil levantarte algo más temprano y hacer el paseo con fuerza antes de que todos en casa despierten
- Prepara las mallas y las deportivas la noche de antes: así lo tendremos todo listo para partir en cuanto nos levantemos… o incluso después, cuando haya ese huequillo no nos dará tanta pereza prepararnos «el pon de deporte»
- «Picotear» ejercicio… un rato aquí… un rato allí…: se pueden juntar varias tandas al día, 15 minutos por la mañana, 15 minutos después de comer, 15 minutos de camino a casa desde el trabajo, desde el Super, desde el cole de los peques, desde el parque,…
- Descubre actividades físicas con las que disfrutes: si te aburre andar (que con los cascos y tu música favorita es un momento de desconexión de fuera y conexión de dentro genial) prueba otros deportes que te diviertan más: bicicleta, natación, salsa, zumba, …. cuanto más te divierta, más fácil te resultará convertirla en tu rutina
- Es que… ¡estoy demasiado cansada!
- Reserva el rato de ejercicio para cuando tengas todas tus fuerzas: hay gente que tiene más energía por las mañanas, otros al medio día, otros son de las tardes, … ¿tú de qué tipo eres?
- Apaga la Tele: en cuanto te sientes en el sofá a ver la tele… horror… las probabilidades de levantarte y ponerte las deportivas decrecerán exponencialmente al tiempo que lleves sentada. Así que antes de darle al mando, pregúntate si no te sentirás mejor dedicando ese ratillo a mover el esqueleto al aire libre… fijo que sí
- Programa ejercicio con amigos: ésta es una de las mejores formas de asegurar la ración de deporte diaria. Si quedas con alguien te será mucho más difícil decir que hoy no… porque hay quien confía en ti… quien te espera con ilusión… y quién te necesitará para salir a andar el día que esté demasiado cansado
- Es que… ¡parezco un pato mareao! ¡no aguanto ni 10 minutos!
- ¡Empieza por hacer ejercicio en casa! A mí me encanta Elena Malova. Tiene super buena energía, comunica genial, los programas son variados y de muchas aplicaciones, adaptadas a cualquier persona, sea cual sea el estado físico que tenga, … echa un vistazo a ver si te gusta tanto como a mí http://www.elenamalova.com/p/programas-de-entrenamieto.HTML
- Es que…. ¡no sé ni por dónde empezar!
- Pues por poquito. A lo mejor te ayuda utilizar una de las aplicaciones de móvil que hay para registrar tu actividad diaria, la verdad es que mola mucho ver la evolución e incluso compartirla con gente para «competir» de forma super saludable y ver cómo mejoras o mejoráis en equipo. Sports Tracker está muy bien 🙂
- Es que… tengo dolores físicos
- En este caso es preferible que tu médico te indique qué puedes y qué no puedes hacer, todo dependerá del tipo de dolor que padezcas. Durante los meses en los que estuve haciendo Quimioterapia opté por el Yoga y por caminar al paso que mi cuerpo me permitía. Como dije al principio… algo es mejor que nada, así que nunca pienses que no es suficiente, al contrario, siéntete orgullosa de haber hecho al menos un poquito
Por último… hacemos nuestro Plan de Movimiento
Si has llegado hasta aquí es que tienes auténtico interés y estás motivada por empezar… ¡porque vaya rollazo que te he metido! ¡Me super encanta :-)! Coge papel y lápiz… éste es el último paso para empezar en serio ¿estás preparada? Pues apunta y cuelga en la puerta de la nevera TU PLAN PERSONAL, que no se te vaya a olvidar:
- ¿Por qué quieres estar físicamente más activa? Apunta las razones por las que te quieres mover… seguro que te salen un montón (ejemplo: quiero tener 5 kilos menos en Semana Santa)
- ¿Qué hay de malo en no hacer ejercicio? Ale… no hace falta demasiada inspiración porque seguro que tienes una larga lista de razones (ejemplo: no quiero desarrollar enfermedades)
- ¿Qué actividades te gustaría hacer? Apunta la lista de deportes que te gustaría probar, ¡y ponte en marcha! Si ves que no te gusta ninguna, apunta la que menos te desagrade o escoge alguna que puedas hacer con algún amigo
- ¿Cuánto tiempo quiero dedicar a tu momento de movimiento? Piénsalo y apúntalo. Puedes poner, por ejemplo, 20 minutos al día durante las 2 primeras semanas, e ir subiendo un poquito las semanas sucesivas. O puedes poner 30 minutos 3 días a la semana. Tú misma, construye tu propio plan
- ¿Cuáles son mi excusas favoritas? Arriba tienes pistas, pero si estás aquí, ya habrás visto que hay unas cuantas soluciones para cada una de ellas 🙂 Si tienes otros obstáculos que te impidan hacer tu momento de ejercicio, apúntalos e intenta buscar y anotar las soluciones ¡Seguro que las encuentras!
Hasta aquí el Tip#3. Espero que no se te haya hecho demasiado largo y que puedas aprovechar algo de lo que yo también estoy aprendiendo. Es un placer compartirlo contigo… y ya sabes…
Rakelica….el sexo se considera deporte???? 😉 😉
Para que adelgace tiene que practicarse un mínimo de 2 veces a la semana y tomando el liderazgo…la acción, vamos! Y como cualquier otro deporte, acompañado siempre de una dieta saludable 😉 Así que si lo prefieres a caminar…¡Vale!
🙂