¡Hola qué tal!
Os presento el «Cocolate», una receta sabrosísima que perfectamente puede sustituir al convencional batido de chocolate peeeeroooo…. sin lactosa, sin azúcares y con alimentos anticáncer y poderosos que lo convierte en un desayuno ideal (y digo desayuno porque su contenido calórico (por el germen de trigo) no nos permite tomarlo por la noche… a no ser que queramos ganar un poco de peso 😉
A mí me resulta delicioso: un chocolate calentito sienta de maravilla a cualquier hora del día y si encima eliminas lactosa, que lo hace realmente pesado, es todo un PLACER que nunca debes dejar de tener. Seguramente hayáis identificado que este batido lleva «Coco» (sí, sí, el nombre es muy ingenioso 😉 ) pero si no te gusta (y lo digo por mi Silvia) tienes dos opciones: cambiar la leche de coco por otra vegetal (de avena, arroz, almendras, …) o probarlo y flipar… porque el sabor del coco queda tan camuflado entre el chocolate que quizás ni lo notes… o sí, y entonces te volverás adicta a mi Cocolate. Al incorporar el germen de trigo lo espesamos un poco, dándole así «cuerpo» de chocolate auténtico, pero como todo y como siempre, es opcional y puedes hacer tantos cambios en esta receta como desees… el caso es disfrutar. Bueno, ¿estás preparado? Pues ahí va… tómate tu tiempo porque se trata de una receta super laboriosa… necesitas la friolera de… ¡4 minutos y un cazo!
INGREDIENTES:
- Leche de coco: la leche de coco tiene más calorías que las de otras leches vegetales (almendras, avena, mijo, …) sin embargo tiene muchas propiedades y un sabor exquisito para preparar tus batidos, postres, cremas, dar un toque exótico a tus guisos, arroces, … Es rica en minerales (magnesio, fósforo y calcio) por lo que es genial para prevenir la osteoporosis o tomar durante la menopausia ¡Tiene sólo un 2% de azúcar a pesar de lo dulce que es al gusto!
- Azúcar de coco: tiene un índice glucémico bajo así que es una forma saludable de sustituir el azúcar. Rico en vitaminas B, en potasio, zinc y hierro. El azúcar de coco es un poco caro, pero es verdad que tomo muy poco, así que me doy el capricho de que sea éste.
- Cacao puro en polvo sin azúcar: el cacao es uno de los alimentos más antioxidantes que hay, un genial aliado para luchar contra los radicales libres.
- Germen de trigo: lo encontrarás en Herboristerías. Es la parte intermedia del grano del trigo, en la que se encuentran las vitaminas y los ácidos grasos esenciales. Tiene muchas proteínas, de ahí que sea adecuado tomarlo sólo por la mañana. Rico en Hierro, en Potasio y en Zinc y además tiene mucha fibra, ideal para nuestro tránsito intestinal. También contiene ácido fólico, así que es ideal para embarazadas y niños
- Un trocito de vaina de vainilla, que contiene un fitoquímico que ayuda a la prevención del cáncer
ELABORACIÓN:
- En un cazo ponemos todos los ingredientes (la vainilla abierta por la mitad par extraer las semilltas, que son las que más sabor tienen) y removemos bien hasta que se disuelva el cacao gracias a tu energía y al calor de la vitrocerámica. Deja el tiempo que quieras para que esté más o menos caliente… sírvelo en un vaso… et voilà! El placer está servido 🙂 ¡Qué aproveche!
Ufffff, este no me lo pierdo!!! Mmmmm!!!
Solo me falta el germen de trigo mañana me hago con él.
Pd: … ya no me caben mas botes de semillas y especias en el armario!!! 🙂 🙂 🙂
Jajaja!!! Éste te va a encantar churri. Poco a poco… no hay que introducirlo todo de golpe 🙂
Hola, qué medida pongo de cada cosa? 🙁
Pues mira Mireia, yo lo hago mucho a ojo. Leche como para un vaso, a partir de ahí una cucharada de cacao, media de azúcar de coco y un buen cucharón de germen de trigo…pruébalo también con copos de avena integral. Luego si te gusta más o menos espeso, más o menos dulce, más o menos fuerte … echas más o menos de todo 😉
Pingback: Reto Punto de No Retorno: TIP#4 – Planificación en la comida para no estresarse – ¿AHORA QUÉ COMO?